Me enamoré de un maniquí, 35 años
Mucho se ha debatido o se puede debatir sobre lo que son o fueron las películas típicas de los años 80. Muchos nombres se mencionarán cuando el tema salte a la mesa pero es raro que con lo importante que fue para el público casi nunca se mencione a esa rareza extravagante recordada como Me enamoré de un maniquí.
Dirigida por Michael Gottlieb (quien con ella alcanzó el mejor éxito de su carrera) y con un reparto sólido si nos centramos en el cine juvenil de la época, fue la película que puso en el ojo del huracán a una actriz a la que para los estándares de Hollywood su tiempo estaba a punto de terminar: Kim Cattrall, que después se volvería internacionalmente famosa gracias a la serie Sex and the City.
Mezcla del Pigmalión, My Fair Lady, algunos episodios de la Dimensión Desconocida y una alta dosis de absurdo y comedia romántica Me enamoré de un maniquí cumple ahora 35 años de haberse estrenado y contra todos los pronósticos de haberse convertido en un gran éxito de taquilla.
¿Cuáles son las ventajas de un cine dedicado por completo al entretenimiento? ¿Cuáles son sus desventajas? Para platicar sobre esto y sobre las extrañas cualidades de Me enamoré de un maniquí invitamos a este podcast al periodista Eythel Aracil, que también es editor en redes sociales, fotógrafo y creador visual. Es decir, sabe, y mucho, del tema.
Hablemos de Me enamoré de un maniquí.
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