Días de gracia
Lo roto y el pegamento
Por Erick Estrada
Cinegarage
El tema de un país separado en fragmentos que han perdido las esquinas necesitaba una contraparte. Primero tuvimos el acercamiento paródico y a todo vapor de Luis Estrada con El infierno (México 2010), una reinterpretación más que un señalamiento; una mirada rabiosa y loca más que una cacería de culpables.
Después apareció Miss Bala (México, 2011) de Gerardo Naranjo, una película casi impresionista que igualmente más que buscar responsables dejaba saber al mundo la confusión en que se vive y se muere en algunas ciudades de México.
Extendiendo el margen se podría mencionar a Bala mordida (México, 2009) de Diego Muñoz, la propuesta más neutral de esa pequeña lista y que, igual que las anteriores, despojaba a las placas de policía de cualquier poder para dejarnos saber que incluso la ley no sabe dónde dejó la brújula.
La forma que faltaba la entrega ahora Everrdo Gout con Días de gracia, una versión mucho más posmoderna y fragmentada, ahora que 12 años nos separan del referente fragmentado y posmoderno que a muchos les parecerá lógico y que conocemos como Amores perros (México, 2000).
El punto que une a estas cuatro películas es trágicamente el mismo, la no salida, la certeza única de que nadie sabe lo que ocurre: el oxímoron de un país descabezado en más de un sentido. La diferencia en el caso de Días de gracia es que su forma es probablemente la más evidente de todas.
Gout toma por asalto la pantalla apoyado -quizá más de la cuenta- en la fotografía de Luis Sansas, multifacética en sus texturas y alucinante en su despliegue y en la gigantesca cantidad de información que entrega una vez montada. El problema, mi problema, es que esa información muchas veces no corresponde con la otra que entregan los personajes y tampoco con un guión que también quiere decir mucho más pero que a veces se ve opacado por encuadres que a fuerza de mostrar se vuelven inecesarios, como el famoso punto de vista de una camilla en un hospital.
De todos modos, Gout sale de los hoyos en que se mete su discurso fragmentado en la línea del caleidoscópico mecánico (que no lisérgico, no se me vaya a malinterpretar), uno que a fuerza de querer confundirnos para evidenciar nuestra desorientación usa a esa tormenta de secuencias montadas en paralelo y a los saltos en el tiempo como sustituto (no sé si voluntario) de la violencia a la que quiere entender. Es decir, Gout opta por la violentación de su montaje (que a su vez viene de la violentación misma del encuadre) para obviar la violencia gráfica. El problema no aparece hasta que se abusa del recurso y creo que Gout lo hace más de una vez. Es paradójico en una película con estos temas, que el ojo descanse cuando la violencia gráfica sustituye a la de su lenguaje audiovisual, y eso ocurre cuando vamos llegando a la segunda mitad de la película.
Hay, sin embargo, otros muchos aciertos que en un temeroso cine nacional destacan como inovación aunque no lo sean. El principal es el valor de apostar por todo, de no quedarse con nada en el tintero; están también las elipsis sonoras que hacen juego con el manejo de la música (un soundtrack al que Gout manipula con decisión y certeza poco vistos en el cine mexicano contemporáneo) y los inserts de tres mundiales de futbol, quizá los únicos elementos que cohesionan este discurso de tiempos y espacios paralelos, a veces penetrando los terrenos del sinsentido.
Si en El infierno era la parodia y el humor lo que nos guiaba hacia el final y si en Miss Bala era ese tiempo real que se colaba al cinematográfico lo que nos daba el único norte, en Días de gracia es una forma trepidante e impía la que comunica la sensación de muchas de las calles de este país, un formato, de todos modos arriesgado, que más allá de su manufactura y de escenas inspiradas, corre el riesgo de perder el mensaje y ahogarlo en el marco agitado en que Gout decidió acomodarlo, con todo y el enorme pergamento-guía que aquí se llama música y futbol.
No se trata sin embargo de un error garrafal. Hablando de discurso audiovisual, prefiero el abuso y sus riesgos, que un minimalismo subnormal y que juegue a la segura.
Días de gracia
(México, 2011)
Dirige: Everardo Valerio Gout
Actúan: Paulina Gaitán, Carlos Bardem , Miguel Rodarte, Mario Zaragoza, Dolores Heredia
Guión: Everardo Valerio Gout, David Rutsala
Fotografía: Luis David Sansans
wooooooooooow!!!! buneas actauciones, buen guion, buena produccion. De resaltarse la actuación de Tenoch Huerta y del actor que hace de su jefe qu la verdad no se como se llama y como olvidar al que hace de su parejota (que siempre la hace de policia corrupto, torturado y chillon, pero le sale bien)
La vi cuando la estrenaron dos veces y tengo ganas de volver a verla!!!
LEYENDE PERRUNA ha de estar acostumbrado a ver a la señorita laura, es por eso que no le entendio….eso es comprensible. verdad mi cara de llama?
GABY, casi al final hay un partido de futbol llanero y salen los nombres de los actores y sus personajes. Ves como si es importante no salir como borrego ANTES que termine la pelicula?
DAVID, que pelicula viste mi’jo? no ves que al final despues que lupe le da baje a su jefe policiaco el es el secuestrador del CHIDO? LUPE es el que tiene apuntandole a alejandro y al iguana, es el que mata al cartucho y es matado con un balazo en la frente por la IGUANA. Pon mas atencion en el cine o dejate de sacarte los mocos cuando las luces estan apagadas……..
Ayer la vi mis respeto a si debería actuar la Policía en México como Lupe buena película
Concuerdo contigo Erik… gracias.
Con quien no estoy de acuerdo es con Lucas, en relación a su crítica de Aquí entre nos, que a mi parecer es una historia bien construida y bien contada. Un poco larga pero nada grave. Simpática y bien actuada.
Saludos.
De lo mejor que ha hecho el cine nacional en años y de lo mejor que hay en la cartelera actual. El ritmo que le impone Gout a la cinta corresponde totalmente con la trama. Las actuaciones son geniales así como su fotografía, la música y por supuesto la dirección. Desgraciadamente la gente no sabe apreciar el buen cine nacional, hay más gente en las salas por bodrios como “Aquí entre nos” o la basura que nos llega de Hollywood, ni hablar. Saludos
Excelente película, tal vez el trepidante cambio de imágenes sea un poco alucinatorio, pero corresponde al nivel de confusión y violencia que existe en México (y gran parte del mundo)… Felicitaciones a todos los actores y actrices que participaron en esta película, particularmente la de Tenoch Huerta (que lamentable e inexplicablemente no está mencionado en el reparto al final de este artículo)
si eh falto el nombre del protagonista!!! considero que es muy recomendable, tendra algunas partes confusas que al final no le restan genialidad a la película y sobre todo te hacen reflexionar acerca de la violencia y la situacion en materia de seguridad del pais. Y considero que si pagamos por ver peliculas extranjeras que son menos buenas que esta entonces nada nos cuesta apoyar al cine nacional, en la sala solo habian como 15 personas y para Mirror Mirror la sala estaba repleta!!!!
pinche pelicula culera es una mierda
estoy de acuerdo con el abuso de recursos que hace el director en la película; además, desués de los 40 min. la película te empieza a trapar, no es aburrida pero algo le falta al inicio; la historia y actuaciones son muy buenas, bastante recomendable
Esta buena o no? por que a mi ya me la recomendaron Hugh Jackman y Danny DeVito vía Twitter.. xD
“Si tienes un tiempo libre, sal al cine. Hoy Días de gracia. ¡Un clásico instantáneo”, escribió Hugh
“Mexicanos al Grito del Cine. Vean Días de gracia hoy”, escribió en español DeVito, añadiendo el nombre del productor Gout.